Si he de vivir (Cortázar)
la sopa fría, los zapatos rotos, o que en mitad de la opulencia
se alce la rama seca de la tos, ladrándome
tu nombre deformado, las vocales de espuma, y en los dedos
se me peguen las sábanas, y nada me dé paz.
No aprenderé por eso a quererte mejor,
pero desalojado de la felicidad
sabré cuánta me dabas con solamente a veces estar cerca.
Esto creo entenderlo, pero me engaño:
hará falta la escarcha del dintel
para que el guarecido en el portal comprenda
la luz del comedor, los manteles de leche, y el aroma
del pan que pasa su morena mano por la hendija.
Tan lejos ya de ti
como un ojo del otro,
de esta asumida adversidad
nacerá la mirada que por fin te merezca.
2 comentarios:
Hay hombres que son más que hombres, son el niño que juega con la vida de esos hombres.
Hay hombres que son menos que la vida de esos hombres, son la corteza del ataúd de cada niño muerto.
Hugo Mujica.
Cabezaaaaa...! Hace tanto que te esperaba por aca...ahi en entradas antigua podes leer mas.
Abrazo
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